Cuando se compran videojuegos para los más pequeños de la casa siempre surge la duda de si se está seleccionando el título más adecuado para ellos. No sólo ha de crear un interés en ellos, también ha de ser instructivo y que les proporcione una experiencia divertida. Esta elección no es fácil para todo el mundo, incluso para aquellos padres que conocen del tema.
No dejar excluida su opinión. La compra es para ellos, por lo tanto hay que tener en cuenta lo que opinan sobre el videojuego. Seguro que tienen información de sobra para saber si les atrae o no, o cuáles son los puntos fuertes que más les impactan. El formar parte del proceso hace que su interés sea más elevado y se sientan más alegres.
Pero también hay que tener en cuenta la posibilidad de que quieran probar un título que no les corresponde por edad o que no sea adecuado. Establecer unos límites es fundamental para que todas las partes tengan claro lo que es válido.
Tener información previa del juego. En la actualidad abundan las reseñas sobre videojuegos. Antes la información era más escasa y había que ceñirse a comentarios de conocidos o reviews de revistas especializadas. Las redes sociales, páginas web y plataformas como youtube permiten conocer más sobre los videojuegos. Con ello se puede obtener una primera impresión sobre si es bueno para los niños o no.
Además todo este proceso puede hacerse acompañado de los más pequeños para que ellos vean si les crea algún tipo de emoción. De esa forma pueden generar interés o incluso rechazo. Es una buena forma de comprobar cuál es su reacción y así decidirse por la compra.
Aprovechar los contenidos digitales. El formato físico está sufriendo un importante revés en cuanto a número de ventas mientras la descarga digital aumenta cada día a pasos agigantados. Gracias a ella se pueden obtener precios más económicos con los que optimizar la compra para conseguir dos juegos en el lugar de uno.
Además muchos de los títulos recomendados para los niños son difíciles de encontrar en las tiendas, por lo tanto hay que acudir a internet para su posterior descarga. Es cierto que puede surgir el problema de no tener algo físico que tocar, lo cual crea un vínculo más grande aunque luego lo que importe sea lo que aparece en la pantalla. Esto se puede solventar acompañando con un juguete o peluche relacionado con la temática.
Escoger correctamente la videoconsola. Cuando toca comprar la mejor videoconsola surgen dudas. Normalmente todos quieren tener aquella plataforma que está de moda o la que tienen todos sus amigos. Suele coincidir que en las franjas de edad más bajas todos tienen predilección por las videoconsolas de Nintendo las cuales están orientadas a un público diferente que Microsoft y Sony cuyas temáticas son mucho más adultas.
Pese a ello en PC se ofrece mucha más variedad en el catálogo y es una inversión segura según vayan pasando los años, evitando que la consola quede en el olvido y no se vuelva a tocar más porque les interesan unas nuevas plataformas. Gracias a esto se puede empezar con un catálogo más infantil para más tarde ir subiendo según la edad. Además casi todos los hogares tienen un portátil o sobremesa, por lo que se reduce el coste de tener que comprar un nuevo dispositivo.
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